martes, febrero 01, 2011

PELIGRO, ESTO NO ME GUSTA NADA

Informa Parrado de otra desaparición, esta muy romántica, no quedan muchas ganaderías con un halo de gloria santacolomeña como la que fuera de Dionisio Rodriguez y al paso que llevan menos quedaran. Ya hace años que los dueños entregaron la "cuchara" y desecharon cualquier atisbo de lucha por la supervivencia de este otrora glorioso hierro. Yo visité "Hernandinos" en uno de mis primeros viajes al campo charro, mi amigo Emilio me ponía en la pista -"Si quieres ver algo testimonial pero único, acercate a lo de Dionisio Rodriguez"- me acerqué y me sirvió para apenarme, aquello se veía que había sido bueno pero ya estaba en pleno declive. Cuando los toreros entendieron que la formula era dar gato por liebre y "ponerse" con trenes de mercancias semovientes en vez de rápidos y ligeros Talgos pusieron en el paredón todas estas ganaderías encastadas y con comportamiento bravo. La culpa como no, para los aficionados, pero no hay que ir tan lejos en la historia para recordar que esta ganadería en los noventa al igual que los "Buendías" lidiaba en la feria de Bilbao, y que el problema principal es que ningún torero quería ver estos ni otros parecidos acudiendo a sus telas. Al final desaparecen ganaderías señeras y sobretodo diferentes, de esas que te hacen pensar que la fiesta es mucho más que la monotemática de todos los días de sota, caballo y rey. Pases y pases sin fundamento ni fuste y mucho menos emoción ninguna. Esta es la fiesta que quieren, y luego se quejan de que no va nadie.
Otro hierro que peligra es el señero hierro de como dice el ganadero, mi señora madre, la "pedrajeña" divisa de la casa Guardiola a nombre de la señora de D. Salvador, Doña Maria Luisa Dominguez y Pérez de Vargas también peligra. Llevamos unos años que Alfonso aquejado de diversas dolencias y el pago de años de buena vida está fastidiado. Por tanto ha perdido contacto y ya saben ustedes aquello del ojo del dueño que engorda al caballo. Traslado sus reses desde "el Toruño" a Cádiz y se inventó un hierro nuevo donde agrupó las reses de "Villamarta" que le tocaron, las de "Pedrajas" quedaron en el hierro a nombre de su madre, pero ahora a los toreros no les gustan los toros espectaculares, que tienen el defecto de humillar poco. Como solo entienden una tauromaquia, corta y sin recursos también dejaron de querer enfrentarse a tan señera ganadería. Los aficonados al arte y los taurinos y acólitos empezaron a tildar la corrida del lunes de resaca con el apelativo del "Tentadero en la Maestranza" y ese homenaje a la bravura terminó desapareciendo de la cartelería. Pero no solo del coso del arenal desapareció este hierro que en Zaragoza brindó algunos de los pasajes más memorables de la última década del pasado siglo. Corridas de aquellas en que los buenos aficionados al toro terminaban llorando por la emoción del espectáculo de la bravura. Ahora llevan unos años en que la desterraron a los festejos de rejones de segunda división y hoy nos enteramos que ni para puerta cerrada sirven que los han tenido que llevar al matadero.
Informa tambien Luis Miguel Parrado de otras dos desapariciones de las que no puedo en este caso hacerme deudo, "La Campana" esa ganadería que amortizaba el apoderado de Morante de la Puebla obligando a todos los empresarios que deseaban contratar al artista con la obligación de incorporar al cartel de la feria una corrida de su hierro, producto de varios desechos del encaste mayoritario y que como máximo éxito puede apuntar en Premio "Miau" de "La Cabaña Brava" a la corrida peor presentada de la Feria del Pilar.

También parece que se cierra por derribo la ganadería del "Marques de Domecq", ya hace años que echo en falta aquellos toros que se lidiaban a final de los ochenta y principios de los noventa, lomitendidos, acapachados de cuerna y de comportamiento cambiante que encumbraban los triunfos de Rincón y Ortega Cano (Cuando era torero) estos últimos años habian cambiado las hechuras eran de comportamiento borreguil y además no vendian sino reventando el mercado por abajo... y no digo nada de la sustitución del último S. Isidro que me hizo coger el petate y abandonar Madrid por verguenza ajena. De este tipo de ganaderías podría yo sugerir tranquilamente otras treinta o cuarenta que podrían seguir el ejemplo y nadie echariamos de menos. De lo ocurrido con las dos primeras a los aficionados solo puede causarnos tristeza y desazón de lo mal que se está poniendo esto.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola, ya que veo que compartimos aficiones taurinas te invito a que pases a visitar mi blog.

http://azulnocheyoro.blogspot.com/

Un saludo