Hace ya más de un siglo, a la retirada de Rafael Guerra "Guerrita", que hasta ese momento había dominado el toreo y la fiesta a su antojo, una serie de matadores con Luis Mazzantini a la cabeza exigieron la implantación del sorteo de las reses a lidiar y acabar con la potestad del ganadero de elegir el orden de salida de los toros. De ahí la famosa frase de "No hay quinto malo" conclusión a la que llegaron los aficionados al comprobar que los ganaderos reservaban este quinto toro para "Guerrita" para que lo luciera y triunfara con él. Como vemos el "Califa" cordobés ya alternaba con uno por delante como ahora cualquier torero que se precie. Bueno, a lo que íbamos; los toreros exigieron sortear los toros del festejo y que fuera la suerte la encargada de decidir a quien le tocaba cada toro. Acabando con cualquier favoritismo de los ganaderos y evitar las suspicacias al respecto. Un siglo más tarde la evolución de la fiesta nos ha llegado con la elección del toro por parte de los toreros. No solo ya eligen las ganaderías que matan, los compañeros de cartel y el orden de intervención sino que también quieren imponer que dos astados son los que van a estoquear. El melón lo abrieron hace ya años en la Monumental de las Ventas dejando que en festejo extraordinario cada torero se anunciara con lo que quisiera, después vinieron carreras de novillero fulgurante alternando en festejos mixtos para no enfrentarse a los compañeros y mucho menos sortear, este año se van prodigando en los carteles de toreros y toros a modo como sucedió en Olivenza y Valencia para concluir con el esperpento del pasado sábado en Jaén. Allí se presentaban tres toreros, uno para debutar, otro con veinte años de alternativa como padrino de la ceremonia y el último muy acostumbrado desde novillero a estos manejos como testigo de la misma. Pero eso sí, cada uno con dos toretes debajo del brazo, o en el maletero de la furgoneta vaya usted a saber, para su actuación. Y lo veían como lo más natural del mundo. Cuando se presentaron los carteles ya hubo alguna suspicacia al anunciar un festejo con tres ganaderías. El empresario en un alarde de cinismo sin paliativos contestó que no habían encontrado una corrida completa para tal efeméride. Eso a principio de temporada y en una plaza que no es precisamente Bilbao, tras una temporada en la que todo el mundo dice que han sobrado miles de toros en el campo, sin contar los que sobraran este año. Así está el negocio hoy en día, se montan los gachet al gusto de la figura de turno, y si confluyen dos y el interés no es el mismo pues se dispone de toros para cada uno y todos tan felices. Lo principal que el pueblo llano disfrute de una tarde de espectáculo, que no vamos a escribir aquí emoción ni nada parecido. Esta es la manera en que va evolucionando la fiesta hace un siglo los toreros exigieron igualdad y acabar con los privilegios de los ganaderos, ahora entregan esos mismos privilegios a los mercaderes al servicio de los llamados figuras y los demás a chantar, otorgar y ver que les queda. Mal vamos.
PD: El dibujo de Facundo, en la web de Taurofilia, lo ha usado para ilustrar el post del festejo de las Ventas, donde también el maestro había elegido el material.
PD: El dibujo de Facundo, en la web de Taurofilia, lo ha usado para ilustrar el post del festejo de las Ventas, donde también el maestro había elegido el material.
2 comentarios:
El dibujo es muy bueno.
Y el Presidente también se las trae ... que tampoco debemos olvidarnos de él.
Publicar un comentario